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Non me resisto a reproducir un micro relato de Eduardo Galeano recollido nun microlibro de Alianza Cien que leva o título xenérico de "Mujeres" e que converte ás mulleres no que sempre deberían ser: as verdadeiras protagonistas da vida e dun mundo ben gobernado.
1978, La Paz: Cinco mujeres
“El enemigo principal ¿cuál es?
¿La dictadura militar? ¿La burguesía boliviana? ¿El imperialismo? No, compañeros. Yo quiero decirles estito: nuestro enemigo principal es el miedo. Lo tenemos adentro.
Estito dijo Domitila en la mina de estaño de Catavi y entonces se vino a la capital con otras cuatro mujeres y una veintena de hijos. En Navidad empezaron la huelga de hambre. Nadie creyó en ellas. A más de uno le pareció un buen chiste:
-Así que cinco mujeres van a voltear la dictadura.
El sacerdote Luis Espinal es el primero en sumarse. Al rato ya son mil quinientos los que hambrean en toda Bolivia.
Las cinco mujeres acostumbradas al hambre desde que nacieron, llaman al agua pollo o pavo y chuleta a la sal, y la risa las alimenta. Se multiplican mientras tanto los huelguistas de hambre, tres mil, diez mil, hasta que son incontables los bolivianos que dejan de comer y dejan de trabajar y veintitrés días después del comienzo de la huelga de hambre el pueblo invade las calles y ya no hay manera de parar esto.
Las cinco mujeres han volteado la dictadura militar.
Se cadra só temos unha dificultade principal por salvar.
Urxe identificar o inimigo principal.
Contra que ditadura temos que loitar, aquí e agora?
Contra a dos mercados?
Contra a das insolidarias institucións europeas?
Contra a dos cativos gobernos que nos desgobernan, que nos recortan e nos mutilan?
Se cadra, só temos que loitar contra o noso medo. Ese que temos dentro, a miúdo sen darnos de conta.
4 comentarios:
Muy buena tu reflexión, apropiado el relato para los tiempos en los que estamos. Creo, que los periodistas, escritores y rádio (la televisión está comprada), deben coger el micro, el lápiz o el ordenador y alentar a los miles de miedosos que estamos viendo como destruyen nuestro país, nuestra economía y nuestro bienestar social. Miles de miedosos con ganas de hacer algo. Así, tal vez, lleguemos a ser como Islandia y saber (que raro que no se oiga nada) lo bien que les va a ellos desde que juzgaron a sus banqueros y políticos.
Con las redes sociales por medio, todos tenemos la oportunidad de trasmitir inquietudes y de alentar la lucha contra el miedo interior que me temo es lo que alientan los políticos. Miedo a que lo peor está por llegar (que puede ser) para que nos inmovilice, para que traguemos recortes y mutilaciones sin dejar, eso si, de pagar más y más impuestos.
Saúdos, Javier: Lembreime de entrar neste rinconciño porque o outro día buscando lecturas de verán na biblioteca acabei con "Destrucción" entre as mans... Luís Cividnaes
Agardo que logo, á hora de ler, non se che caese das mans. Ou polo menos que, de ser eso o caso, non che mancara nos pés.
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